Uno de los momentos más importantes de la última gala del MET en Nueva York fue el arribo de la mediática Kim Kardashian. Decimos que fue un momento importante porque la joven llegó a la gala luciendo uno de los vestidos más icónicos de la historia de la moda: el vestido con el que Marilyn Monroe le cantó el ‘Feliz Cumpleaños’ al ex presidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy.
El vestido fue usado por Marilyn Monroe en 1962 y luego fue ingresado al Museo Ripley’s Believe It or Not!. Kim Kardashian visitó el museo con la intención de pedir prestado el vestido de la icónica actriz, se lo prestaron, pero con la condición de que debía devolverlo en impecables condiciones, algo que no ocurrió.
Scott Fordney, el coleccionista especializado en objetos de Marilyn Monroe, ha publicado en redes algunas imágenes que demuestran el estado deplorable en el que Kim Kardashian devolvió el vestido. La tela cercana a la cremallera está rasgada y el vestido ha perdido piedras en la zona lumbar. Los cristales y lentejuelas fueron cosidos a mano uno a uno sobre el cuerpo de Marilyn y puede que se cayeran debido al roce con el chal que Kim Karashian lució en la gala.
Kim Kardashian pidió prestado el vestido de Marilyn Monroe al museo porque el dress code de la MET Gala era ir vestido al estilo de la edad de oro estadounidense de principios del siglo pasado, por lo tanto, el vestido que usó la actriz cumplía con todos los requisitos.
El vestido que usó Marilyn Monroe en 1962 fue una obra del diseñador de vestuario Jean Louis que se basaba a su vez en un boceto de Bob Mackie. Sin duda, una pieza única e irremplazable que, hasta la fecha, se encontraba en buen estado de conservación.