María Becerra alcanzó la fama mundial y se consolidó como una figura de la música a nivel mundial, en poco menos de dos años. Cada canción que lanza se vuelve un verdadero éxito. Pero además de tener una gran llegada con su público a través de sus canciones, lo hace por medio de Instagram donde comparte detalles de su vida. En las últimas horas, la cantante abrió su corazón y reveló los problemas que atravesó vinculados a la percepción de su cuerpo y cómo logró cambiarlo.
Desde sus primeras apariciones en los medios de comunicación, María Becerra habló sobre el bullying que sufrió cuando era adolescente y se ocupó de tratar diversas temáticas que afectan a la sociedad, en especial a la juventud. Días atrás, la cantante compartió una foto comparativa en la que expuso su peso y la evidencia del cambio muscular tras empezar a realizar actividad física.
En este sentido, más tarde, María Becerra mostró algunos ejercicios que hace en su rutina, con la que pudo lograr el cambio que buscaba desde hace un tiempo, según sus propias palabras. Hace seis meses comenzó a realizar actividad física y el trabajo comenzó a quedar en evidencia en el cambio de su cuerpo, el cual mostró a sus seguidores. La artista remarcó cómo logró modificar la zona de los brazos y la espalda, donde nota los músculos más tonificados.
“Estoy muy contenta, me felicito a mi misma. Estoy orgullosa”, expresó frente a cámara María Becerra con una gran sonrisa. Más tarde, habló en detalle acerca de su experiencia personal respecto de la forma en que ella percibía su cuerpo, la cual en muchas ocasiones le generó grandes inseguridades al punto de pedir que ciertos contenidos audiovisuales que realizaba por sus canciones no fueran publicados. “Me veía horrible con las patas muy flacas”, detalló sobre los motivos que la llevaron a dejar de lado ciertas prendas de vestir, en especial los shorts o faldas cortas.
“La he pasado mal con los prejuicios hacia mí misma, con cómo me veía yo en el espejo, con comentarios que he recibido, sobre todo, de chica. Nací prematura, pesando un kilo doscientos. La mayoría de los bebés nacen pesando entre tres y cuatro kilos. Siempre fui super flaquita, y me costó mucho aumentar masa muscular y subir de peso. Siempre pesé entre 41 y 43 kilos”, detalló María Becerra sobre su historia de vida, que hoy comparte para generar consciencia y explicar del por qué este cambio corporal le genera mucha felicidad.