Detrás de la sonrisa perfecta de William Levy mientras navega por los mares del éxito, hay una historia triste. El actor cubano es una de las caras más representativas de Hispanoamérica que forjó su carrera como galán de telenovelas. Pero su infancia en Cuba fue muy dura y sufrió el abandono de su padre.
William Levy nació en la isla caribeña en el seno de una familia con muchas falencias. Nació en la localidad de Cojímar, en el municipio de Habana del Este. Su padre, que presuntamente se llama Carlos, abandonó el hogar y dejó a la madre del actor, Bárbara Levy, embarazada y con 17 años.
Para William Levy fue muy difícil perdonar este abandono. Sobre todo, cuando cuenta las dificultades que tenían para subsistir en Cuba. Más de una vez, el protagonista de ‘Café con aroma a mujer’ ha contado lo duro que era sobrevivir. “Con solo un cuarto de pollo por persona al mes, un pan por persona al día y raciones de comida limitadas, siempre tenía hambre”.
Un ejemplo más de aquellos años lo contó Levy en su cuenta de Instagram. “No teníamos lujos como pasta de dientes, así que usamos carbón y bicarbonato de sodio”, detalló el intérprete. De aquella época, la estrella que brilló en las producciones de Televisa siempre destacó el rol que tuvieron su madre y su abuela, dos mujeres que nunca dejaron que proteger y cuidar a su familia.
Hace poco tiempo, William Levy contó que buscó contactar nuevamente a su padre. Pero de ese encuentro no quiso dar muchos detalles y tan solo mencionó que supo perdonar, entendiendo que el hombre era muy joven como para tomar algunas responsabilidades. De todas maneras, siempre ha dicho que toda su experiencia de niño le ayudó a forjar los valores con los que cría hoy a sus hijos.