Ryan Gosling y Rachel McAdams son dos de los actores más amados por su público, tanto por sus películas individuales, como por El Diario de Noa (también conocida como Diario de una Pasión o The Notebook), el filme basado en el libro de Nicholas Sparks, que ambos convirtieron en un éxito. Lo que no todos saben es que ambos llegaron a odiarse durante la filmación.
Rachel McAdams y Ryan Gosling coincidieron en El Diario de Noa en el año 2004. Ambos ya eran conocidos para el público amante de las películas, aunque no con la fama que ostentan actualmente. Cuando apenas se encontraron en el set de filmación ya se pudo ver que el rodaje iba a ser complicado.
Fueron muchas las discusiones entre ambos. Ryan Gosling no le perdonaba una a ella, ni Rachel McAdams a él. Equivocarse en un diálogo o en algún movimiento podía desatar una guerra entre ambos. Incluso, como si fueran dos chicos, el director de la película Nick Cassavetes, los tuvo que encerrar en una habitación para que arreglen sus problemas. Había dos posibilidades, o se mataban o dialogaban.
Por suerte para el director, los dos salieron de la habitación totalmente ilesos. Tal vez con el orgullo un poco herido, pero desde ese momento el rodaje de la película se pudo hacer en otros términos. Ryan Gosling y Rachel McAdams no eran amigos, pero ya no se querían matar en cada escena y El Diario de Noá finalmente fue un éxito en todo el mundo.
Lo que nadie preveía es que tiempo después, los dos actores se volverían a encontrar. Había pasado el tiempo, ambos habían continuado con sus carreras y Rachel McAdams y Ryan Gosling se cruzaron en New York y aprovecharon para hablar de lo sucedido.
En ese encuentro, ambos actores se explicaron muchas cosas, se dieron cuenta de otras y meses después llegó la bomba: los protagonistas de El Diario de Noa realmente se habían convertido en una pareja. Todos sus fanáticos felices. Realmente se habían enamorado. Habían pasado del odio al amor.
Pero hay cosas que no duran para siempre y la relación de Ryan Gosling y Rachel McAdams fue una de ellas. La relación duró dos años, pero se separaron. No porque hayan dejado de quererse, pero por sus trabajos se les hacía cada vez más difícil sostener esa unión y decidieron cortar todo. Con el tiempo volvieron a intentarlo, pero fueron cuatro meses hasta que volvieron a declarar el final.
Hoy, Ryan Gosling y Rachel McAdams siguen separados. Ambos tienen sus propias familias ya constituidas, con dos hijos cada uno. Pero ambos sirvieron para demostrar que del odio al amor se puede pasar muy fácilmente y que los dos hicieron una hermosa pareja en la ficción y en la vida real.