Cuando uno piensa en Anne Hathaway inmediatamente la cabeza se acuerda de su increíble talento y belleza en el mundo del cine y la televisión. La ganadora de un premio Oscar es además una de las actrices con mejor voz y su versatilidad la han hecho interpretar infinidad de tipos de personajes.
Pero la realidad indica que nada de todo esto hubiera sido posible si seguía adelante con sus principales planes de cuando era más chica. Es que recientemente uno de sus hermanos ha confesado que Anne Hathaway cambió completamente de parecer en algún punto de su vida, pero que previo a ser actriz ella estaba convencida en entregar su alma a dios y convertirse en monja.
Como en cualquier niño normal, las tradiciones y costumbres de su familia la acercaron en gran manera a la iglesia católica y es por ello que estaba segura de que quería seguir el camino de Dios y ser una monja más. Al parecer toda su infancia estaba segura de pertenecer a Dios. “Me criaron como católica. Cuando tenía 11 años, sentí que recibí un llamado de Dios para ser monja”.
Pero con el paso del tiempo hubo un factor que la hizo cambiar por completo de parecer: “Pero cuando tenía unos 15 años, me di cuenta de que mi hermano mayor era gay y no podía apoyar una religión que no apoyaba a mi hermano. Ahora me llamo cristiana sin denominación, porque no he encontrado la religión para mí” Se dió cuenta de que el catolicismo castigaba y negaba a la gente como su hermano por lo que inmediatamente decidió alejarse de ese mundo y centrarse en lo que más le gustaba, la actuación.
Con el tiempo llegó su primer gran éxito “Diarios de una princesa” y el resto es historia pero pocos sabían que la carrera de la gran Anne Hathaway podría haber terminado antes de comenzar en un convento para monjas.