“La Niñera” sin duda alguna fue una de las series más queridas y respetadas de los años 90, no se podía concebir la sola idea de no ver sus capítulos y reírse a carcajada con cada una de las ocurrencias de Fran Fine y toda la familia Sheffield. Su éxito rotundo se basó en un humor familiar más que sano y un guion repleto de chistes originales interpretado por un equipo de actuación que supo entender a la perfección cuál era su lugar en todo momento.
Las estadísticas siempre posicionan a “La Niñera” en primer lugar al momento de fijar cuál era la serie cómica más vista y el mundo entero solo hablaba del posible amor de la Srta Fine y el productor Max Sheffield. Parecía que dicha comedia sería infinita porque las situaciones de humor entre los protagonistas parecían infinitas. Acompañado a todo el cóctel de humor también estaba de fondo la historia de amor que nunca llegaba a concretarse entre los protagonistas.
Al momento de preguntarle a la productora y protagonista de la serie, la gran Fran Dresher, sobre el porqué del fin de la serie ella lo ha tenido bien claro. A su parecer el hecho de que finalmente se haya consumado el amor entre los protagonistas y se hayan casado para vivir un amor eterno, esto ha sido suficiente para el público y ha pasado a otra cosa.
“Cuando una serie se teje en torno al amor de dos personas que no pueden tenerse mutuamente, hay que dejarlo así. Por mucho que se quiera un final feliz para los personajes, en cuanto se cede a la atracción, la gente deja de sintoniza”.
Y Fran Drescher no podía estar más en lo cierto ya que en cuanto la pareja se casó los números se fueron a pique y debieron cancelar la serie ya que la fantasía de ese amor ya se había cumplido.