El amor es algo magnífico que nos eleva y nos hace muy felices, cuando comenzamos una relación sin duda alguna que estamos en constante buen humor y todo nos parece color de rosa. A su vez, la otra persona pareciera ser perfecta, su manera de verse, sus actitudes para con nosotros, el tiempo juntos, todo es ideal. A medida que va pasando el tiempo cada vez nos vamos enamorando más hasta que un día las cosas comienzan a cambiar. La pareja deja de ser romántica y la monotonía es parte de la rutina. Esa persona que era insuperable ya no es tan divertida y comienzan las peleas, la convivencia tiene sus primeros roces y de pronto ya estamos un poco agobiados por ese amor que eran tan bueno.
Es en ese preciso momento que nos tenemos que poner a analizar si esa pareja está por terminar, en caso de que veas algunos de los siguientes signos que destacaremos a continuación es mejor que vayas buscando piso porque en cualquier día te encuentras haciendo las maletas.
Por ejemplo, algunas personas comienzan a alejarse construyendo muros, tanto físicamente (una pareja comienza a buscar pasar más tiempo en una habitación diferente), o emocionalmente (compartiendo menos información). Es evidente que construir límites es un obstáculo para avanzar hacia el futuro.
Otro caso se da cuando una persona quiere salir continuamente, socializar y asistir sola a eventos puede estar demostrando una preferencia por la soltería. Puedes preguntar respetuosamente las razones o la justificación del cambio de preferencia, pero considera si alguna vez habrá una respuesta aceptable al deseo de pasar tiempo socializando sin ti.
Por último, si tu pareja ha perdido interés en la intimidad y el romance, es normal que quieras saber por qué. La frialdad para con el otro no siempre es intencional, simplemente es algo que de pronto aflora y de un día para el otro las cosas ya no funcionan. Hay que estar muy atento.