Julio Iglesias Jr siempre ha tenido la fama de ser un músico que vivió a la sombra del gran nombre que logró tener su padre, Julio Iglesias. Su vida siempre ha sido descrita por él mismo como muy feliz y alegre, mirando a su padre e intentando imitarlo en cuanto a su talento musical. Siempre ha sido más que amable con la prensa y se ha destacado por ser sumamente abierto al momento de contar sus intimidades, es decir, es un enamorado de las cámaras.
Su matrimonio con Charisse Verhaert supo pasar desapercibido independientemente de que ella fuera una bella modelo que podría cautivar a todo el mundo con su gran figura y carisma. Siempre se mostraron más que felices e intentaron dar al mundo la imagen de pareja perfecta. Ambos son guapos, ricos y exitosos. Pero no siempre todo lo que brilla es oro y llegó.
Fue el pasado 11 de febrero cuando se conoció la noticia del fin del matrimonio entre Julio Iglesias Jr. (48 años) y Charisse Verhaert (39) tras más de ocho años casados. Fue la modelo la que dio el paso definitivo para disolver la unión, con una demanda interpuesta en la Corte de Miami el 3 de agosto de 2020, aunque no fue hasta seis meses después cuando la información salió a la luz.
Charisse le reclamaba un reparto equitativo de los bienes, el uso exclusivo de la mansión familiar en la que residen (valorada en más de un millón de euros) y una pensión compensatoria que le permitiera seguir teniendo el nivel de vida del que ha gozado dentro de su matrimonio.
Sin embargo, en los términos de la demanda también había una petición muy especial: la custodia de la mascota que tienen en común, Molly. Verhaert no estaba dispuesta a renunciar al valor afectivo y sentimental de la perrita, y este asunto también se ha podido saldar de forma amistosa entre ambas partes.