Shakira ya cogió su avión y se marchó a continuar su vida en Miami, junto a sus dos hijos y toda su familia. La idea es hacer borrón y cuenta nueva y tener un vida más tranquila y menos convulsionada luego de tanta lucha mediática con su ex y la nueva novia del mismo. Todo hacía parecer que las aguas se calmarían y que finalmente se haría un “alto al fuego” en esta batalla.
Pero esta vez el que levantó su espada fue Gerard Piqué quien en un vivo junto con Gerard Romero vertió una frase que la gran mayoría catalogó de xenófoba y racista. En el interno de defender a su nueva novia, Clara Chía, describió el gran sufrimiento que atravesó la joven de 23 años luego de la sesión realizada por su ex pareja junto a Bizarrap y la cantidad de críticas desmedidas.
"El tema de tirar beef (críticas) está muy bien y es la moda, el zasca. Pero luego no pensamos las consecuencias a nivel mental a la gente a la que se lo tiras. Queda muy bien a título personal, la p*** ama, pero luego no pensamos en la otra persona” afirmó Gerard Piqué sobre su novia.
Y luego vino la frase tan criticada: "Mi ex pareja pues es latinoamericana... No sabes lo que he llegado a recibir por redes sociales de gente que es fan. Son gente que no tiene vida" dijo con dureza, algo que el público latino tomó muy mal ya que utilizó su nacionalidad con el fin de despreciar a la cantante y menoscabar a las personas de aquellas latitudes.
Momentos más tarde Shakira ha posteado un todas las banderas que conforman Latinoamérica junto con la frase “Orgullosa de ser Latinoamericana” intentando demostrarle a Gerard Piqué que sus palabras no le afectan en lo más mínimo y que no podrá utilizar su nacionalidad con el fin de menospreciarla. Error garrafal del catalán que se ganó aún más el odio de los fans de Shakira.