Los Moulins de Villars, la impresionante mansión que alguna vez perteneció a la icónica Grace Kelly y su esposo el príncipe Rainiero III de Mónaco, ofrece un vistazo a la opulenta vida de la realeza y el encanto de la Riviera Francesa. Ubicada en la pintoresca localidad de Villars-sur-Glâne, Suiza, esta lujosa propiedad revela el legado de la actriz convertida en princesa y la belleza del estilo de vida que solía llamar hogar.
El interior de Los Moulins de Villars evoca una elegancia atemporal y un refinamiento clásico. Los espacios interiores están adornados con detalles lujosos, desde techos decorados hasta exquisitos acabados de mármol y muebles de época cuidadosamente seleccionados. Grandes ventanales permiten que la luz natural bañe las habitaciones, creando una atmósfera luminosa y acogedora.
La mansión cuenta con amplias habitaciones diseñadas para el confort y la privacidad, incluyendo suites majestuosas que ofrecen vistas panorámicas de los alrededores. El diseño arquitectónico y la distribución de los espacios reflejan la elegancia discreta que caracterizó a Grace Kelly, una figura icónica de la elegancia y la sofisticación.
En cuanto al costo de esta lujosa morada, Los Moulins de Villars es una propiedad que está fuera del alcance de la mayoría. La que fuera estrella de Hollywood descubrió los Moulins de Villars pocos años antes de su prematura muerte y ahora esta joya histórica sale al mercado por 11,5 millones, un valor que indudablemente es para algunos pocos y la hace sumamente exclusiva.
Los Moulins de Villars se mantiene como un testimonio de la vida lujosa que Grace Kelly y su esposo compartieron durante su tiempo allí. Más allá de su valor financiero, la propiedad representa un pedazo de la historia de la realeza y ofrece una ventana a la vida de una de las figuras más icónicas del siglo XX.