El pasado viernes fue uno de los días más importantes para la hermana de la diseñadora Lourdes Montes. Isabel Montes Parejo, más conocida como Sibi, volvía a pasar por el altar, era su segundo matrimonio tras conseguir la nulidad matrimonial de su primer marido, Álvaro Sanchís González-Palomino.
Feliz, radiante y espectacular llegó la novia. Con puntualidad británica, la ceremonia religiosa era a las 18:30, llegó Sibi en un coche de gama alta conducido por su cuñado Francisco Rivera Ordóñez que se encargó de llevar a la novia junto a sus hijos, Carmen y Curro, que ejercieron de pajes de honor de su tía, y a su cuñado Francisco Montes Parejo, que tuvo un papel muy importante al ser el padrino de la novia y llevarla hasta el altar.
Nada más bajar del coche se desveló el secreto mejor guardado de una novia, su vestido. El traje de Sibi era una espectacular pieza obra de los diseñadores sevillanos Fernando y Antonio García, que confeccionaron un vestido de estilo romántico, un vaporoso look nupcial que complementó con un velo sujeto por una fina diadema y un gran ramo de flores blancas.
Una novia muy elegante en un día inolvidable para esta pareja que llevaba tres años de discreta relación y que el pasado viernes pusieron el broche de oro a su bonita historia de amor dándose el ‘Sí, quiero’ en la Iglesia de San Francisco de El Puerto de Santa María, Cádiz, una localidad muy familiar para los novios, dado que a los dos les unen grandes lazos con esta localidad gaditana y quisieron casarse en este lugar tan especial para ambas familias.
Los otros grandes protagonistas del día fueron los dos hijos del matrimonio Rivera-Montes. Los hijos de Francisco y Lourdes ejercieron de pajes de honor de su tía y tuvieron un importante papel en este mágico día para Sibi. A ella le hacía especial ilusión que sus dos únicos sobrinos estuvieran este día con ella. Para este acontecimiento tan especial los hijos de la diseñadora y el ex diestro lucieron unos originales conjuntos, Curro lució un pantalón corto en color negro con una camisa blanca de lino y Carmen optó por un romántico y original vestido.
Un día que Lourdes Montes vivió con especial emoción, no sólo por ver a su hermana pequeña feliz y emocionada en este día, sino porque sus dos hijos formaban parte del cortejo nupcial, siendo los otros grandes protagonistas de un día inolvidable para toda la familia que veía como después de más de cinco años, la pequeña de los Montes-Parejo volvía a recuperar la ilusión de volver a enamorarse hasta que Mateo Ibáñez se cruzó en su camino y ya nunca más se volvieron a separar.
Muchos fueron los que quisieron compartir con la pareja el día más felices de sus vidas y al enlace no podían faltar las familias los contrayentes que estaban inmensamente emocionados de ver a unos novios tan enamorados.
La hermana de la novia, Lourdes Montes, espectacular con un vestido ceñido de tirantes, de cuerpo ceñido y falda de corte acampanado en color malva, decorado con franjas negras a contraste en la zona del busto, del diseñador sevillano Antonio García. Complemento su outfit con unas sandalias de tacón de pulseras negras y un clutch metálico.
La madre de la novia, Lourdes Parejo fue igualmente otra de las asistentes que destacó por su elegancia y estilismo. La suegra de Francisco Rivera optó para la boda de su hija por un elegante vestido floral, junto a su pareja Esteban Blanco.
La hija de Francisco Rivera Ordóñez, Cayetana, nacida de su relación con la aristócrata Eugenia Martínez de Irujo, muy amiga de la novia, también quiso compartir este día con toda la familia política de su padre. La joven fue una de las invitadas más elegantes de la boda con un vestido color púrpura de escote corazón que complementó con una torera de mangas francesas a juego.
Como joyas la hija de la duquesa de Montoro remató con unos pendientes de botón maxi, un choker geométrico de espejo, dos brazaletes metalizados y un anillo entrelazado. Igualmente lucio una llamativa cartera artesanal y unas sandalias de esparto en nude.
La sorpresa de la tarde fue que Tana, que ya se rumoreaba que podría haber roto con su novio Manuel Vega, llegó a la boda sola sin la compañía del empresario sevillano lo que viene a confirmar que la ruptura es todo un hecho. El cantante José Manuel Soto también estuvo en el enlace de Sibi Montes y Mateo Ibáñez. Y es que el artista sevillano está casado con Pilar Parejo, hermana de la madre de la novia.
Tras la ceremonia religiosa, los novios junto al resto de sus invitados se desplazaron hasta el Club de Golf de Vistahermosa, donde la familia de los novios y amigos brindaron por la felicidad de este nuevo matrimonio que pusieron el broche de oro a una bonita historia de amor que comenzó hace tres años.
En esa etapa Mateo jugaba en el Club Atlético Central, equipo que preside Alberto Herrera, hijo de Carlos Herrera y la periodista Mariló Montero; y por Jaime Soto, componente del dúo musical ‘Mi hermano y yo’, hijo de José Manuel Soto y primo hermano de Sibi. La psicóloga forma parte del citado club donde trabaja como coach deportiva del club. Justo en ese momento sus miradas se cruzaron y ambos han llevado un noviazgo súper discreto alejado de las cámaras hasta llegar a convertirse en marido y mujer. Forman un tándem perfecto, se compenetran a la perfección y comparten muchas aficiones. Actualmente Mateo, alérgico a los medios de comunicación, trabaja como audito en Deloitte, empresa en la que lleva tres años y ella sigue ejerciendo como psicóloga en el club donde conoció al que ya es su marido.