Ágatha Ruiz de la Prada, la icónica diseñadora española, se encuentra en un momento de profunda transformación personal y profesional, con un fuerte enfoque en su relación con México. En una reciente conversación, la creadora compartió detalles sobre su inminente regreso al país, un destino que ha sido clave en su carrera y donde, según afirma, existe una conexión natural entre su "filosofía del color" y la vibrante cultura mexicana.
Este octubre, Ruiz de la Prada llegará a México para participar en una serie de desfiles en distintas ciudades, comenzando en Puebla y continuando en Puerto Vallarta, Durango, Ciudad de México y la Riviera Maya. La diseñadora está especialmente emocionada por su primera experiencia del Día de Muertos, una tradición que la fascina y que añade una capa emocional a su regreso.
La relación entre Ágatha y México no es nueva. Desde el primer momento, México ha sido un país fundamental en su trayectoria, y la diseñadora destaca el "flechazo total" que sintió con los colores y la cultura mexicana. La pandemia frenó temporalmente este intercambio creativo, pero Ruiz de la Prada está ansiosa por retomar la conexión y profundizar en su vínculo con un país que "cuanto más lo conoces, más te gusta".
El entusiasmo de Ruiz de la Prada por México se extiende también a la comunidad mexicana en Madrid, donde cada vez se siente más próxima a los ciudadanos que han emigrado a la capital española. Este intercambio cultural ha sido crucial en su proceso de reinvención, un tema central en su actual reflexión sobre la moda y la vida.
"Estamos en un momento de cambio, donde todos estamos muy confusos por el tema del COVID", señala la diseñadora, comparando la situación actual con la crisis de 2008. Para Ruiz de la Prada, este es un momento ideal para replantearse el rumbo de la moda, que ahora debe enfocarse en la sostenibilidad y la calidad. "Ya no se trata de 'tener por tener', sino de elegir cosas bonitas, que duren y que sean respetuosas con el medio ambiente", afirma con determinación.
Además de sus compromisos en México, Ágatha también está volviendo a conectar con América Latina, con eventos planeados en Argentina y otros países de la región. Este renacimiento profesional coincide con cambios significativos en su vida personal. Está a punto de abrir una nueva tienda en Madrid, que también será su estudio y taller, marcando un cambio importante tras 30 años en la misma casa.
Por primera vez, la diseñadora ha decidido delegar la dirección artística de su desfile en manos de otro creativo, Carlos Marán. Esta colaboración, según ella, será un punto de inflexión en su carrera. "Será un desfile muy 'Agatha', pero también muy moderno y distinto", asegura, destacando la importancia de disfrutar plenamente cada momento y experiencia.
Ágatha Ruiz de la Prada se muestra más consciente que nunca del valor de lo excepcional en su vida, desde los viajes hasta las personas que ha conocido en su camino. "A veces he ido demasiado deprisa y lo he dado por normal, pero no lo es; es absolutamente excepcional", reflexiona, lista para abrazar esta nueva etapa con la misma pasión y color que siempre han definido su trabajo.