Las horas de sueño en las personas son necesarias para mantener un óptimo estado de salud. Así como cuidamos el cuerpo físico y la alimentación, en el mismo nivel se encuentra el dormir. Aunque nos hemos cansado de escuchar que tenemos que dormir entre 7 y 9 horas diarias la realidad es que esto no es lo único que tenemos que tener en cuenta para que nuestro descanso sea eficiente.
Resulta que cada persona es diferente, tiene horarios distintos, costumbres y un ritmo de vida diferente, es por ello que aplicar una ley universal en estos casos puede resultar ciertamente controversial. Para ello te proponemos que tengas en cuenta estos puntos y empieces a regular tu sueño de forma personalizada.
No todas las épocas de la vida son iguales, hay años donde estamos con un ritmo de vida más tranquilo y otros donde el ritmo se acelera. Esto es lo primero que tenemos que tener en cuenta para comenzar a regular nuestras horas de sueño. Lo importante es tomar consciencia sobre nuestro cuerpo y lo que va necesitando. Si estamos en un tiempo de nuestra vida donde tenemos muchas actividades es posible que nuestro cuerpo llegue a las horas de la noche agotado. De ser así posiblemente tu cuerpo te pida mas horas de descanso.
Lo primero que te recomendamos es acostarte a dormir antes de las 11 de la noche, esto te permitirá que tu cuerpo no llegue al momento del sueño exhausto y que puedas conciliar el sueño de forma tranquila y eficiente.
Antes de dormir escoge realizar actividades que te ayuden a relajar tu sistema nervioso y evita todas aquellas acciones que lo estimules como por ejemplo el uso de pantallas y el consumo de azúcar, entre otras. De esta forma tu cuerpo se sentirá más relajado y te costará menos conciliar el sueño.