El ejercicio es una de las rutinas que más beneficios le aportará a tu organismo, ya que ayudará a la circulación sanguínea, a oxigenar los músculos, a reducir los niveles de estrés y a generar hormonas que sean positivas para tu estado de ánimo. El pilates es ideal para aquellas personas que quieren comenzar a tener un mayor control de su cuerpo y también quieren tonificar su musculatura.
Si piensas que el ejercicio no es lo tuyo, es hora de comenzar con el pilates, ya que la rutina de ejercicios que propone es ideal para hacerla desde casa. Además en esta nota te ayudaremos a conocer algunos de sus ejercicios. Prestá atención que de seguro te va a entusiasmar esta rutina que además te ayudará a tonificar tu cuerpo.
¿Con qué ejercicios puedo empezar a practicar pilates desde casa?
El primer ejercicio que abordaremos es “la sierra”, para realizarlo debes sentarte con las piernas y tratar de ponerlas más allá de tus caderas. Los huesos de los glúteos se deben encontrar bien apoyados en el piso. Una vez que te encuentres en esta posición estirarás la columna con los brazos abiertos y girarás el tronco de un lado a otro siempre manteniendo una respiración tranquila y constante. Irás a un costado y luego siguiendo el ritmo de tu respiración irás lentamente hacia el otro.
Un ejercicio que te proveerá de grandes ejercicios y que es sencillo para realizar desde tu casa es el “roll up”. En este caso la idea es estirar los brazos sobre tu cabeza con las palmas de las manos ubicadas hacia arriba, junto con tu respiración empezarás a estirarte todo lo que puedas notando como se alarga cada parte de tu cuerpo. Luego bajarás lentamente e intentarás tocar tus pies con tus manos. Este entrenamiento activará los músculos de tu espalda y también tus abdominales.
Ha llegado el momento de conocer el “rolling back”, para este ejercicio es necesario que te sientes en una colchoneta con las rodillas flexionadas a la altura del pecho y los pies bien cerca de los glúteos. Realizarás una inspiración en el mismo momento en el que ruedes hacia atrás y al exhalar volverás a la posición de inicio. Este ejercicio ayudará a quitarte las molestias de tu espalda y a relajarla.
Para que tu rutina quede completa continuaremos con este ejercicio llamado “el nadador” que consiste en colocarte boca abajo en una colchoneta con los brazos bien estirados por encima de los hombros y luego mover brazos y piernas simulando que estás nadando. Aquí lograrás estimular la zona de abdominal, las piernas y también los brazos.