La procastinación es un hábito que lastimosamente suele pasarle a la mayoría de las personas y esto tiene una razón: la cantidad de información que recibimos es mucha y constante algo que impide que la concentración en un solo tema se pueda dar de manera natural.
Sin embargo hoy te enseñaremos a utilizar el el timeboxing
Este método, recomendado por expertos de Harvard, se basa en asignar bloques de tiempo específicos para diferentes tareas. Desde su aplicación, he experimentado sus beneficios, enfocándome en establecer bloques realistas y crear un horario para organizar actividades diarias de manera eficiente y evitar la molesta procastinación.
La clave radica en la duración realista de estos bloques de tiempo, así como también en la creación de un horario que otorgue estructura a nuestras actividades diarias. Esta estrategia previene la pérdida de tiempo y contribuye a mantener una rutina organizada y a evitar el agotamiento innecesario y por tanto la procastinación.
La prestigiosa Harvard Business Review respalda el timeboxing como una habilidad práctica crucial para los profesionales modernos. En sus palabras, esta técnica "puede que sea la habilidad práctica más importante que puedas desarrollar como profesional a día de hoy". Este respaldo refuerza la relevancia de este hábito y su impacto directo en la eficacia y la productividad y el evitar la procastinación.
Básicamente establecer expectativas alcanzables garantiza que cada tarea reciba la atención necesaria sin sacrificar la calidad del trabajo. Al implementar bloques realistas, se fomenta la concentración, se minimiza la procrastinación y se maximiza la eficiencia en la ejecución de tareas diarias.