Llega un momento en la vida, que por sedentarismo debido al trabajo, falta de hábitos sanos y el propio envejecimiento, la grasa de abdomen y piernas comienza a ser más notoria. Aunque parece que esto no desaparecerá jamás por lo difícil que es ver cambios en el cuerpo, hay dos ejercicios que puedes hacer acostada para eliminar este problema y construir una figura que te guste para lucir cómoda.
Estos son los 2 ejercicios para hacer acostada que pueden eliminar grasa de abdomen y piernas
Si tus días son tan apresurados que no tienes tiempo de ir al gimnasio o realizar rutinas muy largas, estos dos ejercicios para hacer acostada pueden eliminar grasa de abdomen y piernas. Si los realizas diariamente y como complemento a otras actividades físicas, como caminatas, así como una alimentación balanceada, podrías ver cambios significativos en tu figura en poco tiempo. La constancia y esfuerzo constante es lo que marcará la diferencia.
Ejercicio 1
Acosta sobre una esterilla, con la espalda y brazos en el piso, con las palmas sobre el suelo, eleva tus piernas hacia el techo, luego doblas las rodillas de modo que flexiones las piernas en dirección a tu abdomen. Este primer ejercicio es uno de los más eficientes para trabajar el core junto con las extremidades inferiores, de modo que también puedes ver cambios en la cantidad de grasa de abdomen y piernas.
Ejercicio 2
El segundo ejercicio para eliminar la grasa de abdomen y piernas consiste en realizar un puente con el cuerpo acostado sobre la esterilla. Es decir, mientras estás tendida, lleva las plantas de los piel al suelo, bien cimentadas, con las rodillas flexionadas. Luego, eleva tu cadera hacia el techo, de manera que permanezcas como un puente; tendrás que subir y bajar la cadera, manteniendo algunos segundos la postura con cadera arriba; cada vez que subas, cruza los brazos por debajo de tus piernas.
¿Cómo eliminar la grasa focalizada?
Los hábitos saludables son fundamentales para eliminar grasa focalizada, como la grasa abdominal y en piernas. Es decir, contar con un buen descanso, hacer ejercicio y tener una alimentación balanceada son los pilares para lograrlo. Sin embargo, este problema también puede estar relacionado con factores hormonales o relacionados con otras enfermedades, así que lo mejor es que acudas a un médico para obtener un tratamiento más acertado.